Según la consultora especializada en cadena de suministro, DIBAG, existen cuatro tipos principales de inteligencia artificial, cada uno diferenciado por su nivel de autonomía y la tarea que desempeña:
- Supervisada. Esta se nutre de datos de entrenamiento previamente etiquetados, lo que le permite aprender y aplicar su conocimiento para clasificar, predecir o identificar patrones y relaciones.
- No supervisada. Utiliza modelos matemáticos y estadísticos para analizar grandes conjuntos de datos y descubrir patrones y relaciones ocultas sin la necesidad de etiquetas previas.
- Semi-supervisada, Combina características de los dos tipos anteriores y se emplea en situaciones donde el entrenamiento supervisado no es suficiente, y el no supervisado resulta demasiado costoso.
- Basada en refuerzo. Este enfoque se apoya en un sistema de recompensas para aprender de sus acciones y retroalimentaciones, mejorando continuamente su desempeño.
Grupo Kosmos, el conglomerado de empresas en servicios de alimentación más grande de México, se posiciona a favor de herramientas tecnológicas emergentes, toda vez que supongan una mejora dentro de la industria y sean utilizadas con responsabilidad y ética.